Ir al contenido principal

Sumar, Restar, Multiplicar... y Dividir.

Esta carta va dirigida a seis mil personas. Cada una de su padre y de su madre. Cada una de mi Padre y de mi Madre. Con sus diversos carácteres, con sus opiniones, con sus gustos... Pero con algo que les une por encima de todo lo demás. Temblar más que el puente los días claves, cuando se ponen delante de la Madre de la Salud, y Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder.

No olvidéis qué es lo importante. No olvidéis qué es lo accesorio.

Casi se atisban tiempos de gloria para la Hermandad, para sus hermanos, para la gente del barrio. No os empeñéis en ensombrecer lo verdadero con ínfulas, o con personalismos que no llevan a nada. 

Las elecciones vienen en el peor momento. Estamos inmersos en la ilusión desbordante que nos produce la Coronación de nuestra Madre, y un proceso electoral con dos listas supone una ruptura en la cordialidad que debería predominar en este tiempo de alegría.

No voy a expresar públicamente mi inclinación al respecto, como hice en los anteriores comicios, no quiero agradar el trabajo de nadie, y que eso suponga un perjuicio para otro grupo de hermanos. 

Recordad que antes de criticar el trabajo de cualquier componente de la Hermandad, estáis criticando el trabajo de uno de vuestros hermanos. 

No caigáis en la bajeza de criticar otra opinión distinta por el hecho de ser distinta. Dadle el valor a todas aquellas opiniones que vengan, porque se hacen buscando lo mejor para la Hermandad y por tanto para el conjunto de sus hermanos.

Sed hijos de la Salud. Comportáos como hijos de la Salud. Demostrad que seguimos siendo una Hermandad que a pesar de contar con seis mil personas distintas, todas buscan lo mismo bajo el carácter humilde y cristiano que se nos presupone.

Respetaos como hermanos, y quereos como hijos de Dios.

Un abrazo en Cristo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Dos cuaresmas...

Sólo quedan 40 días... 40 días para que queden otros 40... Lo siento, soy un cansino, pero no lo puedo reprimir. Me sale así... Ya tengo incienso en mi casa... tanto que muchas discotecas me comprarían mi "máquina de humo"... solo que ésta no huele a fresa, huele a Gloria... Ya ensayo izquierdos por el pasillo de mi casa... Sigo durmiendo a mi ahijado con sones poco comunes para una nana, pero que pasan por ella... La vida es una semana, pero ya me queda menos para vivirla... Me contradigo yo mismo... Deseo fervientemente que pasen raudas éstas semanas, pero a la vez no... Pasad tranquilas... Dejad que Sevilla se prepare, dejad que me prepare yo, aunque lleve desde el Lunes de Pascua preparándome para la siguiente Semana de mi Vida... y así será... Te esperaré sentado, cuando me levante me pondré mi túnica, y como si de un sueño se tratara, viviré mi vida viéndola a través de un antifaz, o con un costal apretao a las sienes (que ya me toca)... Cada uno elige su mo

Londres

El Árbol de los Amigos...

La vida es como un río... quizás eso lo dé por hecho todo el mundo... quizás sea yo el extraño o el raro que la vea como un parque, un parque frondoso y lleno de árboles en el que un árbol trata de cada cosa, y otro de otra muy distinta... Hoy me he fijado en el árbol de los amigos, y he recapacitado sobre éste árbol, que siendo uno de los más grandes de mi parque, tiene muchas hojas de un color y otras de otro. Yo soy el tronco (sin afán de protagonismo), y hay diversas formas de ser amigo. Hay amigos que los llevas tan pegado al corazón, que forman una parte indisoluble de ti... Son unas ramas que salen del tronco, que ayudan a sostener la copa, cuando se acercan los días de viento, o las grandes lluvias. Son poco más que los dedos de mi mano, pero si ellos no estuvieran, éste tronco que les habla, sería más bien un hierbajo... Hay, otros amigos que salen de éstas ramas, son las ramitas, a los que quizás no veo en meses o en años, pero que siempre están ahí, y con 5 minutos