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Effetá...

"Abre los ojos, y los oídos al estruendo de la Gracia"...

Hubo un día, en el que andaba por la calle, como casi siempre, silbando. Y casi siempre, marchas de Virgen, por parecerme más ricas musicalmente hablando. Y casi siempre, silbo aquellas marchas que voy conociendo por muy antiguas que sean.

Desde Aquella Virgen, La Esperanza de Triana (de Farfán), Valle de Sevilla, o como aquél día, Virgen del Subterráneo.

Aquél día, curiosamente, me precedía en los andares Francis Segura, y extrañado se volvió y me dijo "qué raro es escuchar que alguien silbe Virgen del Subterráneo". Ambos nos saludamos y entablamos una breve conversación en la que tuve oportunidad de felicitarle por su reciente nombramiento como Pregonero de la Semana Santa.

Yo no sé, qué Pregón habéis escuchado muchos de ustedes. Ni siquiera en el Llamador, que acabo de escuchar, criticado por José Manuel de la Linde, o por Antonio Cattoni. Será, que si las gracias no llevan a una Canina Coronada, no les gustan...



Hacía muchísimo que no disfrutaba de un pregón de ésta manera. Por su ritmo, por su declamación, por su contenido, por la corta pero efectiva crítica (ya sea por Santa Catalina, por el traslado del Pregón a Fibes, o por la Morriña de la Iglesia), por el lenguaje tan "de a Pie" usado.

Por llegar a todos y por algo que nunca antes había pasado en el Maestranza. Nombrar a Hermandades como la Misión, Pino Montano, Divino Perdón... y no sólo a Hermandades, sino a barrios donde la Fe también reside aunque no esté custodiada por una Cofradía: San Diego, las Naciones, Sevilla Este.

Por introducir un hashtag en el Pregón. #ÁNIMOGUILLE.

Por cargar las palabras de Fe, de saber que podemos llegar a Dios a través de las imágenes.

Y las lágrimas brotaron cuando nombró al Padre Víctor y a nuestra Hermandad de San José Obrero. Sinceras, hondas y grandiosas palabras las que saeteó desde el Atril del Arenal.

Felicidades Francis, todo lo que te diga es poco porque no tengo el manejo de la palabra que ostentas, por ello quiero mandarte un sonoro "Miarma" y un abrazo lo más fuerte posible, en señal de agradecimiento y orgullo, que supone que un Joven haya dado la lección magistral, con la que a todos dejaste boquiabiertos ayer.

Lo dicho, Gracias. Un Effetá para tí, Miarma.

Foto: M. Martín Vázquez

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