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La Esperanza...

¿Qué queda cuando no hay Esperanza? ¿Qué observas cuando no hay Esperanza?

Qué virtud más buena... y que castigo tan terrible... No puede ser verdad una vida sin Esperanza, no puede seguir adelante, puesto que en ella se fundamenta la Felicidad, el Amor y todas las cosas que merecen la pena, y que hacen que la vida guarde un sentido...

Los paisajes más bellos viven, en la flor de la Esperanza... La Fé se fundamenta en Esperanza... La Caridad se fundamenta en la Esperanza...

Y cuando ya no hay Esperanza se va todo... solo te queda tu cuerpo, y unos designios que te indican por donde ir, a donde mirar, y cómo actuar...

Sé que está escondida dentro de mí... como una luz entre sus manos... que no deja ningún destello respirar...

Así que allí la buscaré... Sé que existe...

La Esperanza es como Dios... sabes que está, pero nunca la has visto... Y yo sé que está, y que la he perdido...

Ojalá la encuentre pronto...

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El Árbol de los Amigos...

La vida es como un río... quizás eso lo dé por hecho todo el mundo... quizás sea yo el extraño o el raro que la vea como un parque, un parque frondoso y lleno de árboles en el que un árbol trata de cada cosa, y otro de otra muy distinta... Hoy me he fijado en el árbol de los amigos, y he recapacitado sobre éste árbol, que siendo uno de los más grandes de mi parque, tiene muchas hojas de un color y otras de otro. Yo soy el tronco (sin afán de protagonismo), y hay diversas formas de ser amigo. Hay amigos que los llevas tan pegado al corazón, que forman una parte indisoluble de ti... Son unas ramas que salen del tronco, que ayudan a sostener la copa, cuando se acercan los días de viento, o las grandes lluvias. Son poco más que los dedos de mi mano, pero si ellos no estuvieran, éste tronco que les habla, sería más bien un hierbajo... Hay, otros amigos que salen de éstas ramas, son las ramitas, a los que quizás no veo en meses o en años, pero que siempre están ahí, y con 5 minutos...

Negro... Tiniebla... Y Morado...

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