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Velando Armas...

Tengo 22 años, llevo esperando la oportunidad hace varios...

Recuerdo un día soleado en la calle Reyes Católicos, hace mucho... Viviría en la Primavera de 1991. A la altura de los "Tres Reyes",  Luis Miguel echó el paso abajo. Y me acerqué a darle un beso a mi padre... Una de ésas estampas que no se te olvidan en la vida...

De pronto sonó el martillo y mi padre me quitó de los brazos de mi madre para enseñarme algo que me marcó desde aquél momento y que no he olvidado desde entonces...

Veía poco sentado bajo aquél paso y sentado en la zambrana... No solté la mano de mi padre, y me decían que la primera iba ocupada por 5 hombres, y unos zapatitos de niño chico...

Yo me dejaba llevar con la seguridad que me impregnaba mi padre, y oliendo el esfuerzo, y escuchando la música, conocí un universo debajo de cual entran los hombres, y salen hechos hermanos, familia... Entre sin saber el significado de la vida, y salí hecho un superdotado para mi edad...

Aquella tarde supe lo que era Hermandad, Amistad, Esfuerzo, Confianza y una multitud de valores, que se resumen bajo el peso de la Fé... Puedo presumir que fui uno de los costaleros más Jóvenes de la Salud...

Hoy iré a encontrarme con aquellos que acompañaban a mi padre, a encontrarme con mis amigos, a encontrarme con mis hermanos... Y si el Soberano quiere, a encontrarme con un sitio bajo las trabajaderas del Cielo, con un sitio de confianza, con un sitio que hará que se vuelva a cumplir mi sueño...

El de ser un hombre, como me enseñó mi padre... El de ser el Costalero que fue mi padre...

Velando armas...

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