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Crisis del Sevilla FC...

Será que yo entiendo las cosas de un modo privilegiado... O será que yo no entiendo las cosas como son...

Tras cuatro temporadas "a la deriva" en asuntos técnicos... Ha llegado la hora del relevo generacional.

Digo "a la deriva" por las inclemencias que produce tener 4 entrenadores distintos en 3 temporadas... Puesto que han llegado títulos, como el conquistado el año pasado al Atlético de Madrid en la Copa de la Península...

No me cabe en la cabeza... Jiménez hizo números mágicos con un equipo muerto, Álvarez siguió en la línea y cambió un poco el estilo del juego, sin llegar a calar lo suficiente. Manzano, coge a un equipo muerto, desilusionado, y con los jugadores que dan la cara lesionados. Sin un centro del campo con coherencia... Sin una pretemporada en la que inculcar un estilo de juego...

No me cabe en la cabeza...

No creo que llegue a la planta noble del Pizjuán... Pero ya está bien de Romaric, ya está bien de Koné, de Cigarini, de Dabo, de Alfaro, de Mul, y un largo etcétera que hace lastrar a éste equipo y a todos los inquilinos de su banquillo...

El año que viene, la solución es traer a un tío que está loco, pero que juega ofensivo... Y subir el abono...

A ver si nos enteramos... Que lo que hizo Juan de Dios Ramos, lo hizo porque encontró a un grupo compacto, con una defensa infranqueable, con un centro del campo magnífico, y con la punta de lanza Kanouté... Pero éso ya pasó...

Así que vamos a dejar de echarle la culpa a los entrenadores... y vamos a mirar a los responsables...


MÁS DINERO EN FICHAJES, Y MENOS TONTERÍAS, DEL NIDO...

Y a Don Gregorio quisiera felicitarlo por sacar partido a la pulpa seca de lo que fuimos... Un equipo sin pilares, sin jugadores de peso que termina en 5ª posición, a 4 puntos de Champions League... Sí esto no es un triunfo, que baje Dios a entrenar al Sevilla FC... El equipo de mis amores...

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La vida es como un río... quizás eso lo dé por hecho todo el mundo... quizás sea yo el extraño o el raro que la vea como un parque, un parque frondoso y lleno de árboles en el que un árbol trata de cada cosa, y otro de otra muy distinta... Hoy me he fijado en el árbol de los amigos, y he recapacitado sobre éste árbol, que siendo uno de los más grandes de mi parque, tiene muchas hojas de un color y otras de otro. Yo soy el tronco (sin afán de protagonismo), y hay diversas formas de ser amigo. Hay amigos que los llevas tan pegado al corazón, que forman una parte indisoluble de ti... Son unas ramas que salen del tronco, que ayudan a sostener la copa, cuando se acercan los días de viento, o las grandes lluvias. Son poco más que los dedos de mi mano, pero si ellos no estuvieran, éste tronco que les habla, sería más bien un hierbajo... Hay, otros amigos que salen de éstas ramas, son las ramitas, a los que quizás no veo en meses o en años, pero que siempre están ahí, y con 5 minutos...

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