Hoy es 24 de Diciembre... para que hablar...
Las familias se reúnen, las chacinas también, los mariscos también... Pero como todo, si no se recuerda de dónde viene el asunto, pues como que todo pierde su interés.
Mañana se cumplirán 2009 años del nacimiento de un hombre que cambió el mundo, o que cambió mi mundo. Nació como un pobre rodeado de ganado, vivió como un pobre y murió como un pobre. Daba mucho que hablar en su época, y da mucho que hablar ahora. No ha perdido su sitio por mucho que pase el tiempo, y así será por los Siglos de los Siglos (si Dios quiere...).
En éste mundo de frivolidad, aparencias y materialismo hace falta mirar un poco hacia atrás, y preguntarse si uno es coherente con lo que cree y con lo que hace.
Quizás es éso lo que me gustó de aquél hombre, su coherencia y sus consecuencias. Si todos fuéramos un poquito cómo él, seguro que cambiarían mucho las cosas.
Quizás cuando ésta noche esté sentado en una mesa en la que todo sea perfecto, me acuerde de mi amigo Mamadhou (un negrito que vende películas), del Monti (ése indigente de mi barrio) y de muchos otros que pasarán la noche como la pasó mi Dios el día de su nacimiento, pobre... Como la vida misma...
Por ello, queridos Sevillanos y foráneos, confío en que paséis una gran Navidad, y que no se os olvide el significado de la fiesta, y aquél hombre que lo hizo todo por nosotros.
Feliz Navidad...
Las familias se reúnen, las chacinas también, los mariscos también... Pero como todo, si no se recuerda de dónde viene el asunto, pues como que todo pierde su interés.
Mañana se cumplirán 2009 años del nacimiento de un hombre que cambió el mundo, o que cambió mi mundo. Nació como un pobre rodeado de ganado, vivió como un pobre y murió como un pobre. Daba mucho que hablar en su época, y da mucho que hablar ahora. No ha perdido su sitio por mucho que pase el tiempo, y así será por los Siglos de los Siglos (si Dios quiere...).
En éste mundo de frivolidad, aparencias y materialismo hace falta mirar un poco hacia atrás, y preguntarse si uno es coherente con lo que cree y con lo que hace.
Quizás es éso lo que me gustó de aquél hombre, su coherencia y sus consecuencias. Si todos fuéramos un poquito cómo él, seguro que cambiarían mucho las cosas.
Quizás cuando ésta noche esté sentado en una mesa en la que todo sea perfecto, me acuerde de mi amigo Mamadhou (un negrito que vende películas), del Monti (ése indigente de mi barrio) y de muchos otros que pasarán la noche como la pasó mi Dios el día de su nacimiento, pobre... Como la vida misma...
Por ello, queridos Sevillanos y foráneos, confío en que paséis una gran Navidad, y que no se os olvide el significado de la fiesta, y aquél hombre que lo hizo todo por nosotros.
Feliz Navidad...
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